Me gusta la quiché ya lo sabéis. Lo he proclamado a los cuatro vientos, y es la segunda que publico en la corta historia del blog. No cabe duda.
Hoy he aprovechado la temporada de higos, están en su mejor momento, y he preparado una tarta diferente. Queso cammembert e higos conjuntan divinamente, queda una mezcla suave, nada pesada y cada bocado con su toque diferente.
Para prepararla, necesitamos:
– 1 lámina de hojaldre
– 200 gramos de leche evaporada
– 3 huevos
– 1 queso cammembert
– 8 higos maduros
– nuez moscada
– pimienta negra
– sal
Precalentamos el horno a 180 grados, calor arriba y abajo.
Extendemos la plancha de hojaldre y la estiramos bien con un rodillo de cocina.
La ponemos sobre nuestro molde y cortamos el excedente pasando el rodillo sobre el borde del molde.
Pinchamos con un tenedor la masa. Y con el dedo vamos acoplando los laterales del molde al hojaldre, para que al hornear queden los bordes ondulados.
Ponemos en el vaso de la batidora la leche, los huevos, la mitad del queso, la sal y la pizca de nuez moscada. Trituramos todo y lo vertemos sobre la masa de hojaldre.
Lavamos bien los higos y los partimos en cuartos. Los vamos colocando con la piel hacia abajo por entre la crema. Algunos se hundirán, y los encontraremos cuando mordamos ;)
Cogemos la otra mitad del queso y a pellizcos vamos cortando y poniendo entre los huecos que queden tras colocar los higos.
Añadimos la pimienta por la superficie.
Metemos al horno a 180 grados durante 30 minutos.
Sacamos, y dejamos templar.
¡A disfrutar!
aquí tenéis la otra quiché, también muy rica por sí le queréis echar un vistazo.