¡Hola!
Esta entrada me trae unos recuerdos preciosos.
Hace 6 años que fuimos de vacaciones a Portugal. Fue uno de esos viajes perfectos. Todo salió rodado.
Eran los primeros dias de junio, muy luminosos y cálidos. Estuvimos en la costa de Caparica, muy bonita, con unos arenales y playas interminables. Lisboa y Sintra nos cautivaron y su gastronomía también.
En la famosa pastelería situada junto a los Jerónimos probamos los pasteles de nata. La pastelería es enorme, son una especie de habitaciones, unidas unas a otras.Y estaba hasta la bandera. No cabía un alma.
No recuerdo la cantidad que comimos, pero sí que fueron bastantes. Aunque para copiosa degustación, la de la mujer de la mesa de al lado. De aspecto British, y en torno a los 60 años, se comió ella sola y sin despeinarse, docena y media de pastelillos ( y sin exagerar, jajaja), acompañados de 3 tazas de té. Nos dejó perplejos. Y nos amenizó la merienda estupendamente, de hecho aún hoy tenemos bastante nítido su recuerdo :)
Sin duda un viaje para repetir.
Con esta receta participo en el concurso que organiza La cocina de Babel, se llama #cocinacallejera.Y consiste en aportar una receta de comida que puedas encontrar a pie de calle, una tapa, un pincho, bocata, un dulce… Espero que os guste mi aportación.
La receta es del libro de Lonely Planet » la mejor comida callejera del mundo», un poco adaptada.
Para preparar los pasteles de Belem, necesitamos:
-1 plancha de hojaldre
-250 grs de leche
-125 grs de crema de leche
-2 cucharadas soperas de harina
-3 cucharadas soperas de azúcar
-5 yemas de huevo
– canela en rama
– vaina de vainilla
-pellizco de sal
– canela molida
-azúcar glas
El modo de hacerlo:
1. Estirar bien con un rodillo la plancha de hojaldre. Cortar unos círculos de masa de unos 8-10 cms con un aro de emplatar, una taza…y colocarlos sobre el molde engrasado de la tartaleta.
2. Precalentamos el horno a 180 grados.
3. Mezclamos en un bol la leche, la crema, las yemas, el azúcar y la sal. Batimos bien. Añadimos la harina poco a poco y sin dejar de batir. Una vez bien mezclado, le ponemos la cáscara de limón, la vainilla y la canela en rama.
4. Ponemos un cazo a fuego suave con la mezcla y removiendo continuamente, veremos que espesa, pasados unos minutos. Entonces ya la tenemos.
La dejamos que se temple, retiramos la canela y la cáscara del limón, y rellenamos con ella nuestras bases de hojaldre que teníamos preparadas.
5. Lo metemos al horno unos 25 minutos, a 180 grados calor arriba y abajo. Si no se dora, pon el grill el último minuto
Si queremos, las servimos con canela y azúcar glas.
Ya sólo queda disfrutarlos. ¿Habéis estado en Lisboa? ¿Y en la Confitería de Belém?