¡Hola!
Estoy muy contenta con la propuesta de hoy, y sobre todo muy satisfecha con el resultado.
Hoy en el desayuno de domingo tenemos … macarons de café.
Estos deliciosos dulces me llevaban un poco de cabeza. Me encantan, pero me daba un miedo horroroso ni siquiera intentar hacerlos. Me parecía un pastelillo muy difícil de conseguir, bien hecho, claro.
Total, que hace algunos días le pregunté a mi compi Macarena cómo los hacía ella, estaba segura que le quedaban perfectos. Me dio su receta y con sus precisas explicaciones me puse al lío.
La verdad es que fue todo rodado, y el resultado muy bueno. Tengo que mejorar en la forma y conseguir que el tamaño sea igual en todos, pero estoy muy muy contenta con mis macarons.
Como ella me ha dado permiso para publicar su receta, pues aquí la tenéis. Y os voy a dar algunos de sus truquillos, que a mí me vinieron fenomenal.
Necesitamos para hacer los macarons de café : ( Receta de M. Pavlovic)
– 90 gramos de claras de huevo envejecidas ( yo usé pasteurizadas)
– 125 gramos de azúcar glas
– 125 gramos de azúcar normal
– 1/2 cucharadita de café, de cremor tártaro
– 125 gramos de almendra molida
– 1 cucharadita de café, de esencia de vainilla
– 1 cucharadita de postre, de café soluble
Macarena, no me mates, pero no he usado ni las claras envejecidas, ni el meringue powder.
Ella que tiene una pastelería muy fina, utiliza esas cosas, pero yo no sabía ni lo que era, así que decidí obviarlo…y como me salieron de lujo, os lo cuento ;)
Vamos con la elaboración:
Todo debe estar a temperatura ambiente
1. Pon el azúcar glas y la almendra molida en un robot de cocina para triturarlos. Yo use THX, 30 segundos, velocidad 7.
Lo repetí 2 o 3 veces seguidas, no más pues me dio miedo que empezase a desprenderse el aceite de la almendra.
2. Tamiza 2 veces la mezcla.
3. Pon en un bol las claras y bate con una batidora de varillas, hasta que espume. Apenas unos segundos. Añade el cremor tártaro y empieza a abrir a potencia media otros 5 segundos.
4. Añade la mitad del azúcar normal , y sigue batiendo unos 7 minutos.
5. Añade la otra mitad del azúcar normal y bate otros 4 minutos a potencia media.
6. Es el momento de añadir la esencia de vainilla y el colorante que le vayas a poner.
En este caso la cucharadita de café soluble.
Bate hasta que el color sea uniforme. La mezcla tiene que estar bien dura.
7. Ahora, añade el azúcar y la almendra tamizados 2 veces.
8. Mezcla con una lengua pastelera, con movimientos envolventes mientras giras el bol. Hasta que esté completamente integrado todo.
Te queda una masa ni espesa ni líquida, de consistencia media.
Este paso es fundamental en la formación del macaron, hay que integrar con mimo, para que la mezcla no se venga abajo.
8. Introduce la masa en una manga pastelera con una boquilla lisa y agujero mediano. La de 6 mm va genial.
9. Ve poniendo la masa sobre un papel de hornear. Debes dejar una separación de unos 2-3 cms entre los macarons para que no se acaben juntando.
Yo he marcado los círculos a modo de guía, en un papel de hornear. Con un vaso de chupito ( el mismo que usé para hacer el agujero de los donuts)
Coloqué el papel marcado sobre una bandeja de hornear, y encima puse otro papel de hornear, superpuesto. Y así me guiaba, iba poniendo la masa con cuidado en el centro de las marcas.
Para evitar el rabito que queda al poner la masa, haz un giro brusco y hacia arriba con la boquilla de la manga, y así ve poniendo todos.
Coge la bandeja y da unos golpes contra la encimera para que salga el aire que pueda contener la masa. La bandeja en horizontal!!!! No se te desparrame la masa ;)
10. Deja que se seque la masa, al tocar la superficie al cabo de un rato, ya no se pega al dedo. Yo los tuve secando 30 minutos.
11. Enciende el horno, calor arriba y abajo a 145 grados.
12. Cuando esté caliente, mete los macarons a hornear.
En mi horno 15 minutos justos, quedaron perfectos.
Tendrás que probar los tiempos de horno, cada horno es distinto.
13. Desliza los macarons con el papel, sobre la encimera humedecida.
Así se facilita el despegado de las conchas.
Inténtalo con cuidado una vez templados, se despegan más fácil.
14. Rellena de lo que quieras, mermeladas, gianduja, ganache de chocolate…
Yo les he puesto una ganache de chocolate negro.
La misma que usé para la tarta de rica de chocolate. Y quedaron divinos.
Simplemente, funde 150 gramos de chocolate con una nuez de mantequilla y un chorrito de leche.
Bate con un tenedor hasta que obtengas una mezcla bien homogénea y brillante.
Ya está listo para rellenar en cuanto se temple.
Pues ya sólo queda disfrutarlos, y te animo mucho mucho a que te lances a prepararlos.
Es una receta para ser un poco metódico, e ir paso a paso. Pero no son tan complicados y el resultado es delicioso.
Muchísimas gracias por la receta, Macarena. Como tú dices, es infalible ;)
Os dejo con la canción de hoy. Pablo Alborán y Carminho, Pérdoname.
¡¡¡ Ay!!!, ¡¡¡¡los pelos de punta!!!!
¡Muy feliz domingo!