¡Hola!
¿Preparado para desayunar? Siiii, pues hoy tenemos…miel sobre hojuelas, o si prefieres, hojuelas con miel.
Es un desayuno súper sencillo y rápido de realizar. Consiste en una masa frita y regada de miel, deliciosa. Y perfecta para comenzar el día, energía de la buena ;)
Me recuerda un poco a las rosquillas Marisol, pero con menos de la mitad de trabajo.
Los ingredientes los tienes seguro en casa, hasta los descarriados del otro día que tuvieron que ir a la floristería corriendo, los tienen.
Vamos a ver qué necesitas para hacer las hojuelas:
INGREDIENTES
– 70 gramos de aceite de girasol
– 70 gramos de anís (licor)
– 2 huevos medianos
– 300 gramos de harina
– aceite para freir ( oliva suave o girasol)
PREPARACIÓN
1. Pon en un bol los huevos, el aceite y el anís y bate con un tenedor.
2. Ve añadiendo harina al bol y batiendo, habrá un momento que tendrás que meter la mano y amasar un poquito.
3. La masa te debe quedar lisa, brillante y perfectamente manejable. Si los huevos son muy grandes, añade un poco más de harina.
4. Forma bolitas con la masa y aplánalas con un rodillo hasta que queden muy finas y se transparente la superficie que tengas debajo.
5. Pon una sartén al fuego con aceite para freír las hojuelas. A potencia media alta ( yo lo hago al 8, y voy cambiando al 7 según veo)
6. Fríe las hojuelas en el aceite caliente, dales la vuelta cuando se doren.
7. Saca a un papel absorbente para quitar el exceso de aceite.
8. Deja enfriar y riega con miel.